SPIRULINA

HOCHSTETTER
OTC.

Espirulina

Nutrición : Suplementos Dietarios

Composición: El principal componente de la Spirulina, es la proteína, entre 60 y un 70%, la cual está en una proporción superior que en cualquier otra sustancia natural. Esta proteína está formada por 18 aminoácidos esenciales, tales como fenilalanina, triptofano, lisina y metionina, escasos en otros productos vegetales fuentes de proteínas, como la soya y los cereales. La digestibilidad de la spirulina es de entre un 83 y un 85%. Otros componentes de la Spirulina son las vitaminas, especialmente del complejo B, siendo interesante su contenido en vitamina B12, la cual es de gran importancia en la síntesis de la hemoglobina de la sangre, pese a lo cual no es sintetizada por los organismos animales. Contiene además, vitamina C, vitamina E, ácido fólico, ácido pantoténico, biotina y betacaroteno, que es el precursor de la vitamina A. Entre los minerales que aporta sobresalen el calcio, fósforo, hierro, sodio y potasio. Su contenido de lípidos es de hasta un 4%, los cuales poseen 2 ácidos grasos esenciales: el ácido gama-linolénico y el ácido linolénico. Por último están los pigmentos: clorofila, carotenoides y ficocianina, este último de gran importancia por su efecto en el sistema inmunológico.
Indicaciones: Complemento en el tratamiento de la obesidad: el aminoácido fenilalanina que contiene la spirulina, contribuye a suprimir el apetito aumentado de las personas obesas, ya que estimula la liberación de las hormonas gastrointestinales, colecistoquina y bombesina, las cuales tienen la función de detener el apetito mediante señales al sistema nervioso central. Por su alto contenido en aminoácidos, vitaminas y minerales esenciales, acompañado de un muy bajo aporte calórico (3 calorías por g), es el complemento ideal de dietas estrictas, donde la falta de nutrientes puede desencadenar en el organismo trastornos psíquicos, como irritabilidad y/o ansiedad, y físicos, exteriorizados por alteraciones del pelo, piel, uñas y una mayor predisposición a adquirir enfermedades, por problemas de los sistemas inmunitarios. Estimulación de la diuresis: por las sustancias que contiene, especialmente ciertos minerales, estimula la función renal, facilitando la eliminación de toxinas desde el organismo. Complemento alimenticio: la Spirulina es un suplemento alimenticio de gran valor en ciertas etapas de la vida, tales como la infancia, la vejez, el embarazo y la lactancia; estos 2 últimos entre otras razones, por su alto contenido de hierro. Como ya antes se mencionó, está indicada como complemento de dietas restrictivas, ya que aporta sustancias esenciales que no son sintetizadas por el organismo. Regulación de la función celular: la ficocianina, pigmento azul de la Spirulina, al ser administrada en pequeñas dosis por vía oral, controla el normal desarrollo de las funciones de las células, previniendo así la presentación de transtornos tales como cáncer. Respecto a esta enfermedad, se ha observado que disminuye el crecimiento celular en los casos de cáncer hepático. Otros usos: mejora la digestión y absorción de los alimentos, al favorecer la multiplicación de los lactobacilos a nivel intestinal. La Spirulina es una importante fuente de ácido gama-linolénico, necesario para el normal funcionamiento del organismo. Reduce la formación de colesterol.
Posología: Obesidad: al inicio del tratamiento 2 a 4 cápsulas, entre ½ y 1 hora antes de cada comida. La cantidad de cápsulas debe adecuarse a la respuesta personal, disminuyendo su número a medida que avanza en la dieta. Las cápsulas deben ingerirse con una adecuada cantidad de líquido. Otros usos: 2 ó 3 cápsulas diarias.
Presentaciones: Envase conteniendo 60 cápsulas.